Un centro de fertilidad usa tarjetas electrónicas, microchips y un software que controla todos los procedimientos para reducir al mínimo los errores
CIUDAD DE MÉXICO.- ¿Cómo puede una pareja que se somete a un tratamiento de reproducción asistida estar segura de que efectivamente son sus óvulos y sus espermatozoides los que se utilizan en la fertilización in vitro? El sistema IVF Witness ofrece ayudar a eliminar las dudas.
Tarjetas electrónicas, microchips y un software que controla los procedimientos realizados en el laboratorio, reducen al mínimo los errores humanos, afirma Alejandro Chávez, director de New Hope Fertility Center (NHFC), clínica que cuenta con el sistema IVF Witness en su sede de Guadalajara y que a partir de enero lo ofrecerá en su sede de la Ciudad de México.
Cada paciente recibe un código personal único y una tarjeta con un microchip de identificación personal que registra toda la información que se genera a lo largo del proceso, y que también es almacenada en un servidor central.
Las probetas donde se colocan las muestras de óvulos y espermatozoides son identificados con el código personal y se les coloca un microchip con los datos del paciente.
“Cuando la paciente va a entrar al cuarto de procedimientos para realizar la extracción de óvulos, nosotros ya preparamos todas la probetas o platos en los que se van a manejar sus células, con un chip de identificación.
“La paciente entra al cuarto de procedimientos, pasa su tarjeta y en ese momento programa todo el laboratorio para que sólo se puedan manejar los platos que tienen el chip con sus datos de identificación.
“Si por alguna razón se mete un plato que no es de la paciente o una muestra externa (de semen), que no está autorizada para ser trabajada con la muestra de la paciente, entonces suena una alarma para alertar a todos, en ese momento habría que parar y revisar las muestras”, detalla el especialista.
Esta tecnología se utiliza también en la identificación de óvulos fecundados y se suma al control de doble testigo, es decir, todas las etapas del procedimiento son vigiladas y comprobadas por dos especialistas de la clínica.
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