Las marcas “hacen lo que quieren, es notorio un desorden en el mercado. La norma es antigua y voluntaria por lo que los productores no están obligados a seguirla.
Las diversas marcas tienen composiciones diferentes y todas usan por igual la denominación: salchicha”, se lee en la revista del consumidor.
En su edición de agosto, la revista presentó la evaluación de salchichas de pavo; Viena; pechuga de pavo; para hot dog y para asar. Se analizó la calidad sanitaria, grasa, fécula, información al consumidor, humedad, sodio, proteína y tipo de carne.
La marca Fud Cuida-t, (Salchicha de pavo) es la que sobresalió por ser la que más miente al consumidor. Se ostenta como un producto de pavo pero también contiene pollo.
Además, contiene la misma cantidad de sodio que un producto regular pero en el empaque se lee “reducido en sodio”.
También contiene la misma cantidad de grasa que las salchichas regulares, es así como nuevamente incumple con la leyenda “reducida en grasa”.
El parámetro mínimo de proteína es de 9.5 por ciento. Al aplicar ese criterio a las salchichas analizadas no todas cumplieron con el estándar de calidad.
Lo que significa que 28 productos contienen menos de 9.5 por ciento de proteínas y contienen mayor porcentaje de carbohidratos.
La marca Línea roja fue la que presentó mayor porcentaje de carbohidratos con un 19.4 por ciento. En tanto, Peñaranda (salchicha de pechuga de pavo) tuvo 33.66 por ciento de grasas y 238 kilocalorías en una salchicha.
Otro rubro a analizar fue el contenido de soya. La adición de este producto es una forma de sustituir a la carne y ajustar los niveles de proteína.
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