TIJUANA, BC.- La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), declaró inconstitucional la llamada “Ley Bonilla”.
Esta polémica ley fue la que permitió Jaime Bonilla Valdez, actual gobernador de Baja California, extender su periodo de mandato de dos años para los que fue electo, a cinco.
La declaración hecha por los ministros de la SCJN, fue unánime y se refirieron a la “Ley Bonilla” como “un fraude a la Constitución, a la ley y a la voluntad popular”.
El ministro Fernando Franco, argumentó que los ciudadanos al momento de votar deben tener la certeza de para qué cargo y por cuánto tiempo eligen a sus representantes, y esto no ocurrió en el caso.
Señaló a su homólogo Juan Luis González Alcántara Carrancá, de violentar el principio de certeza jurídica al alargar el periodo de gobierno una vez que ya había sido electo el gobernador.
El presidente de la SCJN, Arturo Zaldívar, hizo uso de la palabra para fijar su postura, donde afirmó que la Ley Bonilla fue una maquinación por la cual se pretendió violar la voluntad popular.
La “Ley Bonilla” fue un gran fraude a la Constitución, en sentido técnico. Bajo la apariencia de reformar el régimen interno del estado, se alteraron los resultados de un proceso electoral concluido, violando el voto público y la soberanía popular. #SCJN independiente y autónoma. pic.twitter.com/Zk0MuNDFVW
— Arturo Zaldívar (@ArturoZaldivarL) May 11, 2020
La ministra Norma Lucía Piña se sumó a la mayoría advirtiendo que estas reformas a la constitución de Baja California son “un atentado contra la democracia y contra nuestra constitución.”
Tras esto, la SCJN invalidó la Ley Bonilla y ordenó, como efectos de su sentencia, que se vuelva a aplicar el texto anterior de la constitución del estado, donde se establece que el gobierno de Bonilla Valdez terminará el 31 de octubre del próximo año.
Acatará resolución
Amador Rodríguez Lozano, secretario de Gobierno en la entidad, dijo que acatarán el fallo.
No tengo opinión. Es una resolución de la Corte que tiene fuerza de ley. Es el máximo tribunal y eso significa que hay que acatarla sin más y no se puede ni discutir”, expresó.
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