CANCÚN, Q. ROO.- Alrededor de 200 mil personas morales en Quintana Roo deberán de presentar en este mes su declaración anual sobre el Impuesto Sobre la Renta (ISR) por el ejercicio fiscal 2017, ya que a partir del 3 de abril, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) comenzará a notificar las multas a los que incumplieron este compromiso.
Pablo Gutiérrez Laguna, vicepresidente de relaciones y difusión de la Asociación Nacional de Especialistas Fiscales A.C (Anefac), explicó que la declaración anual es la manifestación bajo protesta de decir verdad que cada año hacen los representantes legales de las personas morales ante el SAT y en la cual reflejan la totalidad de las operaciones realizadas en un año fiscal, en donde se determina el resultado del ejercicio que puede ser utilidad o pérdida fiscal, enterando el impuesto.
Ahondó que las personas que están obligadas a presentar su declaración son las personas morales, asociaciones civiles y sociedades mercantiles, entre otras.
El directivo de la Anefac explicó que para presentar la declaración se necesita la contabilidad del ejercicio fiscal, los papeles de trabajo con el cálculo de las partidas, la e-firma y contraseña, ya que se pueden presentar en línea, y los formatos que brinda el SAT.
Si resulta saldo a cargo, en la página del SAT se genera la línea de captura y se paga en el portal del banco; situación que pasa con el saldo a favor, el mismo SAT lo deposita a la cuenta de la persona moral”, dijo.
Gutiérrez Laguna destacó que presentar la declaración anual le interesa a las autoridades fiscales, a los trabajadores, proveedores, instituciones bancarias y demás, que generen facturas electrónicas.
Expresó que la fecha límite para presentar la declaración es el 31 de marzo de 2018, pero se recorrerá hasta el 2 de abril y que las personas morales que no cumplen en tiempo y forma pueden ser sujetos de requerimiento a partir del 3 de abril con multas, recargos y gastos de ejecución. Aunado a que las cifras deben de ser determinados por expertos en la materia, con la finalidad que se cumplan con las disposiciones fiscales.
