La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ingresó un nuevo trámite para conseguir la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat). Lo anterior tras desistirse de un primer proceso.
De acuerdo con lo publicado en la gaceta ambiental de la Semarnat el 3 de noviembre, el 23 de agosto de 2022 fue recibido en la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) el oficio número AIFA-12330 de fecha 17 del mismo mes y año, mediante el cual el general de brigada l.C. D.E.M. Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, en su carácter de ingeniero residente general comandante del agrupamiento de ingenieros Felipe Ángeles, de la Sedena, ingresó el “Trámite unificado de cambio de uso del suelo forestal modalidad B, regional (DTU-BR) que incluye actividad altamente riesgosa”.
El documento incluía el Estudio de Riesgo Ambiental (ERA) correspondiente al proyecto “Construcción de una Base Aérea Civil Militar y el Aeropuerto Internacional Felipe Carrillo Puerto”, para su correspondiente análisis y resolución en materia de Impacto Ambiental y Cambio de Uso de Suelo en Terrenos Forestales (CUSTF), mismo que quedó registrado con la clave 23QR2022V0047.
El 7 de septiembre de 2022, con fundamento en lo dispuesto en el primer párrafo de los artículos 34 y 35 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA), la DGIRA integró el expediente del proyecto, mismo que se puso a disposición del público e incluyó el archivo del DTU-BR y el ERA en el portal electrónico de la Semarnat para que estuviera a disposición del público.
Mediante el oficio 533-MCA-2022, fechado el 13 de septiembre de 2022, la Sedena presentó el desistimiento para continuar el Procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental (PEIA) para el proyecto denominado “Construcción de una Base Aérea Civil Militar y el Aeropuerto Internacional Felipe Carrillo Puerto”.
“Ahora, el Reglamento de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente en materia de Evaluación del Impacto Ambiental prevé en su numeral 50, fracción I que, todo promovente que decida no ejecutar una obra o actividad sujeta a autorización en materia de impacto ambiental deberá comunicarlo por escrito a la Secretaría (Semarnat) para que ésta proceda a archivar el expediente que se hubiere integrado, si la comunicación se realiza durante el Procedimiento de Evaluación de Impacto Ambiental”
Puesto que se buscaba la autorización de impacto ambiental y el cambio de uso del suelo en terrenos forestales, a través de un primer Documento Técnico Unificado (DTU), que incluye un Estudio de Riesgo Ambiental (ERA) que el general de brigada, Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, ingresó el pasado 23 de agosto ante la Semarnat.
Ese DTU fue elaborado por el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) sin embargo, por razones no consignadas, la Sedena decidió no proseguir con ese primer trámite, identificado con el número de expediente 23QR2022V0047.
Robinson Ismael Ramírez González, capitán e ingeniero de construcción, fue quien presentó el oficio de desistimiento, en su calidad de responsable de Estudios Ambientales del proyecto.
Al presentar esa notificación, la Dirección General de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA) dio por concluida la evaluación de ese primer trámite, iniciada el siete de septiembre, lo cual le informó a la Sedena mediante el resolutivo SRA/ DGIRA/ DG- 05567-22, fechado el pasado 27 de octubre.
Pese a lo anterior, la evaluación del impacto ambiental del proyecto se mantiene a través de un segundo trámite iniciado por la Sedena el 15 de septiembre pasado, bajo otro número de expediente: 23QR2022V0050
Dicho trámite corresponde también a un Documento Técnico Unificado en materia de impacto ambiental y cambio de uso del suelo en terrenos forestales, cuya evaluación inició justo ayer, luego de integrado el expediente, el 29 de septiembre.
Cabe destacar que el Aeropuerto Internacional de Tulum con su Base Militar se pretende desarrollar en un polígono de mil 200 hectáreas, con un camino de acceso de 321 kilómetros, ubicado en el ejido Chunyaxché, en el municipio maya de Felipe Carrillo Puerto.
Se ubicaría a 21 kilómetros de Tulum, muy cerca del Tramo 6 del megaproyecto Tren Maya, el área total del proyecto suma mil 521. 19 hectáreas, de las cuales solo 513 hectáreas requieren de cambio de uso de suelo en terrenos forestales, lo que implicaría la remoción total de esa superficie forestal, contemplando especies maderables y no maderables.
Con esta edificación se busca potenciar la demanda turística para el sur de la Riviera Maya, con énfasis en el corredor Playa del Carmen – Tulum- Chetumal y atender las funciones de vigilancia del espacio aéreo en la frontera sureste.
Sé el primero en comentar