Datos preliminares refieren que en Quintana Roo la temporada vacacional de Semana Santa y de Pascua (del 9 al 24 de abril) registró una afluencia de más de 1.2 millones de visitantes, con una ocupación de 81.2% y una derrama económica superior a los 992 millones de dólares.
Además, el movimiento aeroportuario en Cancún superó 11% lo registrado en el 2019, antes de la pandemia.
De acuerdo con el secretario de Turismo de Quintana Roo, Bernardo Cueto Riestra, el estado cuenta con 1,269 centros de hospedaje, equivalente a 123,079 habitaciones de hotel, toda vez que posee una gran conectividad aérea gracias a la conexión que se tiene con más de 112 ciudades en el mundo y por la oferta diversificada en los destinos del Caribe mexicano.
El destino que registró mayor afluencia fue Riviera Maya con 564,135 turistas, 75% más que en el 2021. Le siguió Cancún con 356,818 (alza anual de 14 por ciento).
Respecto a la afluencia de turistas del sur del estado, Chetumal presentó un incremento de 43%, equivalente a 45,313; Bacalar con más de 40%, es decir, 15,775 y Mahahual, con 8,431 turistas.
Los destinos de la zona Maya, Felipe Carrillo Puerto y José María Morelos superaron más de 90% en comparación con el 2021.
El funcionario comentó que durante Semana Santa los destinos del Caribe mexicano tuvieron una afluencia superior a 1.2 millones de turistas, 3% más respecto al 2019.
“Uno de los grandes aciertos en Quintana Roo fue considerar al turismo una actividad esencial, por esta razón desde el inicio de la pandemia se ha trabajado de la mano con el sector, para continuar siendo el destino predilecto de América Latina”, expuso.
“Estos resultados son el reflejo de que cada vez son más las empresas que siguen apostando por el Caribe mexicano, gracias a la confianza que brinda el destino y que se ve complementado por su incomparable riqueza natural, su ubicación estratégica y la gran conectividad con los principales mercados emisores de turistas”, ahondó.
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