En la primera parte de la conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador recordó que cenó con el candidato presidencial Luis Donaldo Colosio antes de ser asesinado en Lomas Taurinas, Tijuana, el 23 de marzo de 1994.
El mandatario federal calificó el homicidio como un crimen de Estado y recordó la conversación que tuvo con el entonces candidato del PRI sobre cambios necesarios para mejorar la economía mexicana, principalmente sobre abandonar el modelo neoliberal.
“Me dolió muchísimo porque imagínense, habíamos hablado de política, del porqué había que cambiar la política neoliberal. Me acuerdo de una expresión. Cuando yo le estoy diciendo que la política neoliberal no es opción para el pueblo de México y que había que darle más importancia a la inversión pública, crear empleos y mejor distribución de la riqueza, me acuerdo de su respuesta: Hay que regresar a Keynes”.
López Obrador relató la cena que tuvo con Colosio el 21 de marzo de 1994, describió la charla como importante y de aproximadamente dos horas.
Indicó que discutieron cambios necesarios en la política económica para mejorar la situación financiera de México.
Reiteró que la muerte de Colosio fue un crimen de Estado, vinculándolo al reciente amparo concedido a Mario Aburto Martínez, el supuesto asesino confeso de Colosio.
Expresó que la conclusión de que fue un crimen de Estado la había alcanzado hace tiempo, y subrayó la incertidumbre que rodeó al caso, con especulaciones sobre si Aburto actuó solo o con la participación de otros.
“Todo esto tiene que ver con el Poder Judicial, no tiene que ver con nosotros, pero sí vamos a pedir a la secretaria de Gobernación que vea esto, porque independientemente de que el señor Aburto tiene derecho a ser protegido por la ley, no es un asunto nada más legal; se trata del homicidio de un candidato a la Presidencia. Ayudaría mucho porque esas cosas no deben repetirse nunca”.
